Prótesis de Pómulos

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La colocación de prótesis de pómulos es una cirugía estética diseñada para mejorar la proyección y el contorno de los pómulos mediante la inserción de implantes.

En qué consiste

La colocación de prótesis de pómulos es una cirugía estética diseñada para mejorar la proyección y el contorno de los pómulos mediante la inserción de implantes. Este procedimiento ayuda a equilibrar las proporciones faciales y a proporcionar una apariencia más armoniosa y juvenil. Los implantes de pómulos están hechos de materiales biocompatibles, como silicona o polietileno poroso, y se seleccionan según las necesidades y deseos específicos del paciente.

Cuándo es necesario

La colocación de prótesis de pómulos está indicada para personas que presentan:
• Pómulos planos o poco definidos que afectan la armonía facial.
• Pérdida de volumen en los pómulos debido al envejecimiento.
• Desequilibrio facial causado por la desproporción entre los pómulos y otras características faciales.
• Deseo de mejorar el contorno facial y la definición de los pómulos.
• Necesidad de corregir deformidades congénitas o traumáticas de los pómulos. Este procedimiento es adecuado tanto para hombres como para mujeres que desean realzar la estructura de sus pómulos y lograr una apariencia facial más equilibrada y juvenil.

Qué beneficios tiene

La colocación de prótesis de pómulos ofrece varios beneficios significativos, incluyendo:
• Mejora de la apariencia estética de los pómulos, proporcionando una mayor proyección y definición.
• Aumento de la confianza y la autoestima del paciente al lograr un contorno facial deseado.
• Restauración del volumen perdido en los pómulos, mejorando la apariencia juvenil del rostro.
• Resultados duraderos y permanentes que mejoran la armonía facial general.
• Procedimiento relativamente rápido con cicatrices mínimas que suelen quedar bien disimuladas.

Cuánto tarda el proceso de recuperación

El proceso de recuperación tras la colocación de prótesis de pómulos varía según la respuesta individual del paciente. Generalmente, la recuperación inicial toma de 1 a 2 semanas. Durante los primeros días, es común experimentar hinchazón, moretones y molestias en la zona de los pómulos, que pueden ser manejados con medicación prescrita por el cirujano. Se recomienda evitar actividades extenuantes y mantener la cabeza elevada para reducir la hinchazón. La mayoría de los pacientes pueden regresar a sus actividades normales dentro de 1 a 2 semanas, aunque la hinchazón residual puede persistir durante varias semanas. Los resultados finales suelen ser visibles después de unos pocos meses, una vez que la hinchazón se ha reducido completamente y los tejidos se han asentado.

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